Si alguna vez has visto cómo tratan las maletas en los aeropuertos, imagina lo que le pasa a tu tabla o a tu foil cuando los facturas. Spoiler: no es bonito. Entre golpes, lanzamientos y el peso de otras maletas encima, tu equipo puede salir del avión en peor estado que después de una sesión de wing en un reef poco amigable. ¿La solución? Un buen boardbag.
Puede parecer un gasto extra, pero piénsalo así: una tabla rota o un foil partido te van a salir muchísimo más caros que invertir en una funda de calidad. No es solo cuestión de proteger tu equipo, sino también tu viaje. Llegar a un paraíso con viento perfecto y darte cuenta de que tu material ha quedado inutilizable es una de esas pesadillas que ningún rider quiere vivir.
Las aerolíneas no entienden de “frágil” cuando se trata de material deportivo. Para ellos, tu tabla es solo otro bulto grande y pesado que hay que meter rápido en la bodega. Ahí es donde entra el boardbag adecuado. No solo amortigua los golpes, sino que también protege de cambios de temperatura, humedad y posibles rozaduras con otros equipajes.
Así que, antes de tu próximo viaje, hazte un favor: invierte en un boardbag bueno. No se trata de si tu material se va a llevar un golpe, sino de cuándo. Y cuando pase, más vale que esté bien protegido. Ahora, si me preguntas cuál recomiendo te diré la mejor maarca: Manera.
Los boardbags Manera están diseñados para aventuras a sitios remotos donde tu material pasará por ferrys, aviones, avionetas y cualquier vehiculo que te imagines. Tienen diferentes modelos para adaptarse a tus necesidades. Personalmente, son los que yo utilizo, te dejo el enlace a la web donde comprarlos en España.
